El sitio oficial de Apple confirmó esta tarde el fallecimiento de Steve Jobs a los 56 años después de perder la batalla contra el cáncer.
“Apple ha perdido a un genio visionario y creativo y el mundo ha perdido a un asombroso ser humano”, ha informado la empresa a través de un escueto comunicado en su página web. “Aquellos que hemos tenido la suerte de conocer y trabajar con Steve hemos perdido a un querido amigo y a un mentor. Steve deja atrás una compañía que sólo él podría haber construido y su espíritu estará siempre en la base de Apple”, añade la nota de la compañía, que ha incluido una fotografía de Jobs en su página de inicio a modo de homenaje a uno de sus creadores.
Jobs -que sufría problemas de salud- renunció a fines de agosto a su cargo de jefe ejecutivo de la compañía de computación en una carta dirigida al consejo de administración de la empresa, en la que decía que no podía continuar cumpliendo con sus tareas.
“Siempre dije que si llegaba el día en el que no podía cumplir con mis deberes y las expectativas como CEO de Apple sería el primero en hacérselos saber. Lamentablemente ese día ha llegado”, indicó Jobs entonces en la misiva.
Jobs es considerado el autor intelectual de exitosos productos de Apple como el teléfono móvil iPhone y el reproductor de música iPod. En 1976 fundó la compañía junto a Steve Wozniak y Ronald Wayne, y jugó un papel fundamental en la revolución de los ordenadores personales. En 1985 fue expulsado de la empresa, lo que provocó una caída en los ingresos de Apple, que se revirtió sólo con su regreso en 1996.